A veces ni nos damos cuenta, pero
aunque lo ignoremos por momentos, que la vida se construye de estos
pequeños destellos que iluminan nuestro camino. Con frecuencia no
sabemos, qué dirección elegir y tanteando damos el primer paso en
aquella que parecía ser la dirección más equivocada y resulta ser
la más adecuada. Solo hay que aprender a sumar, agradecido ver cada
minúsculo pedazo de tierra, que tenemos bajo nuestros pies, sabiendo
que por delante nos espera más. Porque en el arte de vivir, es bueno
tener mucha confianza y saber que lo que viene, lo que es tan
desconocido puede ser bueno, para algo la vida nos llevó a este
punto de nuestra vida, que puede ser muy duro muy complicado pero es
nuestro solo nuestro.
Feliz
viernes de seguir caminando.
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