Sal para que entre...

La nueva semana se asoma. Está ahí afuera. Para encontrarla hay que salir al encuentro con ella. Si te quedas cerrada/o en tu mundo vas a tener más de lo mismo, sin ningún aire fresco. A veces somos como olla a presión y si no paramos si nos descomprimimos las cosas nos salta la válvula y se pierde todo. Hay que ir descomprimiendo poco a poco dejando que entre lo nuevo, el aire fresco. No perderemos por eso ni la esencia ni el contenido, al contrario le daremos más consistencia a todo, dándole una forma nueva. Cada tiempo tiene sus ritmos sus toques especiales, disfrutemos de todos ellos en dosis adecuadas. Salgamos al encuentro de la riqueza que nos espera. No permitamos que la pandemia nos paralice, nos llene de miedo y nos quite la ilusión. Este lunes es un buen pretextos para terminar bien el mes y empezar bien nueva semana.

Feliz lunes de lo nuevo.

Aniversario en el camino

 La cosa siempre fue con ellos, para ellos. Así de sencillo. Fueron ellos y lo siguen siendo, mi combustible en estos años de camino. Mis maestros pacientes, mis ejemplos de ampliar la mirada y ensanchar el corazón. No puedo abarcar, ni a dimensionar toda la riqueza todo lo que he recibido en Polonia, España, México, Irlanda y Paraguay. Son Ustedes que me han preparado para enfrentar lo que la vida tenía para mí preparado. Surgieron muchos sueños, algunos se pudieron realizar, otros esperan, hubo caídas y fracasos, aciertos y desaciertos y mucha felicidad recogida. Cuando en diciembre de 2001 en Ciudad Valles en México me diagnosticaron poliquistosis renal y hepática, pensé que la enfermedad iba a marcar mi vida. Creo que más bien la vida marcó a la enfermedad. Hoy con diálisis y con nuevas experiencias aquí en España pero sintiéndome parte del mundo que quiero y conozco solo puedo estar agradecido. Me siento más vivo y despierto. Gracias por seguir caminando conmigo, buscando armonía.

Feliz sábado de aniversario

Los regalos

Para ella el regalo era la simple respuesta. No era un intento de llegar a equilibrio. Siempre recibimos más de lo que podemos dar. La gratitud nos empuja buscar algo que pueda simbolizar nuestro agradecimiento, reconocimiento. Señalar la importancia que tiene para nosotros alguien, sus palabras, su presencia y su ayuda en momentos concretos de nuestra vida. Algunos la marcan para siempre. Otros dan sabor más dulce a los momentos que parecían amargos. Lo que nos dan, no debe quedar sin respuesta. Aunque muchos dones consideramos inmerecidos, son solo reflejo de la bondad del universo. Serán inmerecidos, si no los sabremos aprovechar, desperdiciando la vida y el tiempo, en luchas interpersonales inútiles. Usemos lo que recibimos para cuidar la casa común hacer feliz nuestra existencia y la de los demás y empujar la historia hacia nuestros sueños, ideales y utopías.

Feliz viernes de regalos.

Parar un poco

No paraba todo en su vida tenía un toque de aceleración. Así era ella, así era su carácter. Aunque ella siempre se justificaba por la cantidad de los pendientes que tenía cada día. Ciertamente como todos estaba muy ocupada, pero no era para tanto. En nuestra vida con demasiada facilidad nos dejamos de presionar, angustiar, llevar los la inercia. No somos nosotros los que dictamos el ritmo son otros los que nos lo imponen. Haz lo que es urgente, lo que es indispensable, pero busca tus momentos de frenar e incluso de detenerte. Que la vida no te va a esperar. Que ocurre aunque a veces no te das cuenta.

Feliz jueves de parar un poco.

Sin guardar

Su costumbre de guardar para después le ha jugado muchas veces una mala pasada. La principal razón era el olvido. A veces guardaba algo para ofrecer a su visita. Cuando llegaba su visita se emocionaba tanto, entreteniéndose con las conversaciones que se olvidaba de lo que tenía guardad a esta ocasión especial. En algunas ocasiones las cosas guardadas de echaron a perder. Lo que llevaba a angustia llena de reproches. Las frutas y las verduras, dulces, galletas y chocolates, vinos y pasteles se pueden reponer, aunque sería mejor no permitir nunca que se estropeen. Lo que no se puede recuperar, es la conversación dejada para después, el tiempo perdido. Todo lo que queremos expresar para decir a alguien, que importante es en nuestra vida si no se dice en el momento nunca será el mismo efecto. No guardes tanto para después la vida, los encuentros son ahora. Después cerraremos los ojos.

Feliz lunes sin guardar.

La gratitud

No era de las personas que exigen aplausos y reconocimientos. Lo que hacía y a daba a los demás era de pura necesidad de corazón. Sabía que cada día su corazón se llenaba de gratitud. El hecho de despertarse por la mañana y poder observar el milagro de la vida que se despierta al amanecer ya se merecía una actitud de gratitud asombro y alegría. Trataba de dirigir estas actitudes a todas las personas a las que encontraba a lo largo de la jornada. En la vida siembre se cumple lo de acción y reacción. El mundo se llena de espejos, ecos, que están en los ojos y los corazones de personas que nos rodean. Algunos incapaces de reflejar y devolver, porque la vida los ha empañado y han perdido el brillo. Otros, tal vez algo ensordecidos por los ruidos y la constante verborrea llena de negativismo. No por ellos iba a dejar repartir su gratitud, porque ella era capaz de atravesar los ruidos abrir las puertas y los corazones. Sé agradecido y muestra tu gratitud a la vida y a los demás y te enriquecerá.

Feliz sábado de gratitud.

La unidad

Parece que en estos tiempos escasea la unidad. No solamente la unidad de las personas, aunque esa es la fundamental y está en la base de una buena convivencia en la familia y en la sociedad, sino también otros tipos de unidad. Entre ellos la unidad entre lo que decimos y hacemos, también la unidad en lo que pensamos y lo que decimos. La unidad en nuestra escala de valores. La unidad en nuestro compromiso, en las promesas públicas que hacemos y la vida diaria que vivimos. La unidad entre nuestras exigencias dirigidas a otros y nuestro actuar de cada día, sin dejar espacio para las excusas y las justificaciones. Busca y trabaja para hacer posible la unidad que enriquece y facilita a nuestras vidas.

Feliz jueves de unidad.

Iniciar bien

Parece que el secreto de éxito de muchas cosas que queremos hacer depende de cómo las iniciamos. Muchas veces lo que viene después es solo consecuencia del inicio, del primer gesto, primera palabra. Sabiendo eso todo parece fácil, aunque luego nos traiciona nuestro carácter, o simplemente el mal día que tenemos, potenciado por nuestras prisas, ansiedades y desconfianzas. Trata de prepararte anímicamente para empezar bien, haz todo lo posible para que el inicio esté acompañado por una sonrisa, una buena palabra. No cuesta mucho pero trae luz y prepara el camino para hacer todas las cosas necesarias para llevar todo a un buen fin.

Feliz miércoles de buenos inicios.

Desde arriba

Levantaba los ojos mirando el cielo. No por soberbio, ni por inseguridad, sino por sentir que la respuesta a sus dudas, la solución de sus problemas está más arriba. Cuando uno puede tomar otra perspectiva, mirar desde más arriba, lo que nos ha crecido y parecía tan grande tapándonos toda la visión. Si miramos más arriba vemos que el mundo es más grande que nuestro problema. Si lo miramos desde arriba vemos que su tamaño es relativo. Confiamos en el poder escondido que nos puede ayudar a salir del hoyo en el que nos metimos. Así que parece cierto que la fuerza nos viene desde arriba, aunque Él que es la fuerza esté en todas partes.

Feliz martes de mirar arriba.

Sin parálisis

Algunas mañana se le llenaban de suspiros. Estos que dejan alguna sensación de pérdida. No, no ha perdido a nadie en concreto y eso en estos tiempos se agradece. La sensación más bien iba unida al tiempo. Sabiendo que tiene mucho que hacer, no había hecho nada. Todo estaba por empezar, pero no empezaba. Es una situación curiosa, inquietante y hasta molesta. Puede ser que atrás de ella, en algunas ocasiones está escondida la pereza, pero en la mayoría de ellos se trata de otras cosas. A veces nos abandonan las fuerzas, hay u exceso de trabajo, también el estrés y la presión constante tienen sus efectos paralizantes. Alguna situación interior no solucionada y el resto de las cosas que se esconden, que no las nombramos ni las enfrentamos pero que nos paralizan. Revisa tus resistencias y pasividades cuando tiene mucho que hacer.

Feliz lunes sin parálisis.

Salir

Parece que a veces nos estamos removiendo en la misma pecera teniendo mar ahí afuera. Nos angustian lastiman las mismas cosas una y otra vez. Chocando con las mismas realidades. Es cierto que tenemos problemas pero ahí fuera está el mundo que es mucho más grande que nuestro propio bote en que nos hemos metido como unos pepinos en conserva apretados y agrios. Aprovecha el domingo para salir afuera y respirar otro aire. Ver que el mundo es mucho más grande que el nuestro, en el que nos movemos. Te esperan muchos caminos y muchas sorpresas. Si no encontraste la respuesta dentro la encontrarás fuera. Solo hay que buscar.

Feliz domingo de salida.

Felicidades Mamá

Tú primer Santo Mamá que podemos celebrar sin distancias. Hoy se celebra a Santa Sofía. Curiosamente el mismo día en México es el día de los Maestros y en Paraguay el día de las Madres en la zona de Madrid San Isidro. Fuiste Madre y Maestra aunque nunca pudiste estudiar para ser una Maestra de escuela, la pobreza después de la guerra no te permitió. Fuiste la maestra de la casa. Siempre atenta a nuestros deberes ayudando empujando animando, poniendo límites. La posibilidad que tuvimos nosotros de estudiar libremente, despreocupados que ustedes no tuvieron por la guerra era el mayor regalo. Animándonos que lo aprovechemos. Respetando nuestras ideas locas sobre nuestro futuro. Siempre cuando eran unidas a estudio, superación recibían su bendición. Como me gustaría hablar contigo, compartir todo lo que pasa. Me falta tu voz al otro lado del teléfono. Hoy celebraré contigo haciendo una mermelada. Tanto te gustaban cosas dulces, podrás disfrutarla. Sigues siendo mi Madre Maestra, pues tu nombre Sofía significa sabiduría. Felicidades Mamá.

Feliz sábado de sabiduría de Mamá.

¿La suerte?

 Anhelaba tener suerte, mucha suerte porque hasta ahora en su vida lo que tenía eran problemas, muchos problemas. No sabía muy bien lo que era tener suerte, es que nunca la ha tenido. Se fijaba en los que según ella eran suertudos. Lo que veía que su vida no era mucho más distinta a la de ellas, ni ellos eran hechos de otro baro. Lo que si pasaba con ellos que tenía mucho cuidado para hacer coincidir las cosas en el tiempo y espacio adecuados. Trataban de organizar su vida según las prioridades y jerarquías de los valores e importancia que tenía cada cosa y cada momento. Así se enfocaban más en lo que hacían sin distraerse con lo que les espera, con lo que tienen que hacer. Cada cosa tenía su tiempo y su orden. Así conseguían buenos resultados. La supuesta suerte es fruto de capacidad de organizar valorar y elegir. Trata que tu vida tenga sus escala de valores y prioridades, una vez detectadas y elegidas… manos a la obra.

Feliz viernes de suerte organizada.

Las huellas

Ella siempre miraba el camino que tenía por delante. No se quedaba parada mirando atrás. Sabía que dejaba las huellas que a los demás que iban detrás de ella la podrán ayudar o por lo menos advertir sobre el peligro. Las huellas sirven para eso. No son guías para repeticiones sino señales de referencia con sus aciertos y errores. Siempre nos advierten en dónde pueda estar peligro. Trata de dejar huellas que ayuden a otros avanzar teniendo más claridad, evitando los sufrimientos, peligros y dolores. Tu vida resplandece, tienes todo para el siguiente paso. No copies, inspírate. La felicidad siempre está por delante.

Feliz jueves de buenas huellas.

Independientes

Qué difícil es no caer en la dependencia de las cosas y de las personas. Siempre es más fácil depender o que dependan de ti. Mucho más difícil es aprender a vivir independiente, no siendo sometido ni sometiendo. Siempre existe el peligro de confundir la independencia con la soberbia y la autosuficiencia. Ser independiente en buen sentido de la palabra es ser capaz seguir el camino, nuestro propio camino que elegimos y el que seguimos con otras personas que ahora nos hacen falta. La libertad de caminar a nuestro ritmo y manera sin necesidad de depender de las personas que nos empujen cada rato ni sustancias que nos den fuerza o ánimo porque en vez de dar nos eso, nos atan y esclavizan. Camina libre, solo/a o acompañado/a.

Feliz martes de independencia.

Bondad silenciosa

Alguien muy sabio ha dicho que “un árbol que cae hace más ruido que una selva que crece”. Lo mismo pasa en nuestras vida. Cada error, equivocación o supuesto fracaso, hacen mucho ruido. Lo ven i difunden los que nos observan, lo hacemos nosotros mismos, haciendo ruido, silenciando tantas cosas buenas que ocurren cada día. Enfocando nuestra atención y la de los demás en hechos puntuales, olvidando todo el contexto. Lógicamente hay que ver los errores para poder corregirlos, pero también hay que ver los aciertos que forman todo un rosario de buenas noticias que pocas veces rezamos. Sería bueno al inicio de esta semana rememorar algunas cosas buenas que nos han pasado últimamente, para empezar la semana con buen pie.

Feliz lunes de la bondad silenciosa.

La amabilidad

No tenía tanta paciencia para que le alcance para todas sus cosas. A veces la estiraba tanto que algo en ella se rompía y por la rotura se derramaba el nerviosismo y la amargura. No porque ella era así, sino porque le fallaba la paciencia. Es que desde niña trataba estar siempre a la altura de las circunstancias, lo que provocaba que frente a cualquier problema por muy pequeño que sea actuaba con tensión. Esta la llevaba a palabras hirientes quitando la paz de una conversación de un encuentro o relación incluso profesional. Trataba de cambiar y no sabía cómo. Alguien dijo que debería empezar por la amabilidad. Cuando la amabilidad ocupa el lugar de la tensión y nerviosismo todo se amortigua calma y suaviza. Trata de ser amable con los que te rodean, con los que entras en el contacto, incluso o tal vez sobre todo en los momentos duros de la vida.

Feliz sábado de amabilidad.

Descanso

La han educado tan bien. Advirtiendo siempre que no debería perder el tiempo. Trataba de aprovechar todo, sin perder un instante en cosas inútiles según ella. Lo que pasa que llegaban momentos que no sabía explicar, que hasta lo que le gustaba hacer la ponía muy nerviosa, siempre al borde de explotar. No admitía comentarios sobre el descanso, que le parecía el lujo de los que tienen mucho dinero. Nunca la han enseñado estar quieta, disfrutar de un tiempo para mirar, pensar, sentir, escuchar, leer. Un tiempo de miradas hacia dentro para poder entender lo que pasa afuera. Encontrar las respuestas y tomar las decisiones. Si nadie te ha enseñado trata de aprender, tomate tu tiempo. Eso no es lujo, ni comodidad, es una necesitad, que te ayuda tomar la distancia y la perspectiva. Responder adecuadamente a las circunstancias de la vida.

Feliz viernes de tomar el tiempo.

Sembrar la paz

Cristina ha descubierto hace tiempo que había gente que pasaba por su vida de manera casual y muy pasajera, dejando huellas imborrables. Gente que cuando te descuidabas sembraba el amor. Sin ningún interés personal. Simplemente con el objetivo de iluminar un poco cada día. Es que saben que donde haya amor habrá paz y donde haya paz habrá amor. Somos nosotros que sembramos paz o sembramos tormentas. Culpando a otros de nuestras carencias, esperando que hagan por nosotros lo que nosotros no queremos hacer. Así que encontrar gente altruista y despreocupada, que no calcula, sino actúa es un regalo. Aunque todos tenemos prisas y cosas que hacer. No sembremos ansiedad sino paz. Eso nos ayuda mirar la vida de una manera más serena y encontrar soluciones más fácilmente o por lo menos caminos que deberíamos transitar.

Feliz jueves de sembrar paz.

Encontrarse

Elizabeth se encontraba con mucha gente, tal vez a veces con demasiada. Entre tanto encuentro le faltaba tiempo para encontrarse con ella misma. Cuando uno se encuentra con uno mismo tiene que ver el lugar y el tiempo de encuentro. Eso permite ubicarse y ver que está pasando, cuales son las fuerzas y los tiempos que manejan nuestras vidas. Cuando ya sabemos en dónde estamos y de que tiempo disponemos podremos planear los siguientes pasos que nos lleven en la dirección que deseamos. Encontrándonos con nosotros mismos tenemos más posibilidades de encontrarnos mejor con otras personas. Usar nuestro punto de partida como la referencia. Poder calcular si las distancias entre nosotros aumentan o disminuyen o se mantienen iguales, claro no solo las físicas sino las afectivas. Busca tu tiempo para los encuentros contigo misma/o.

Feliz martes de encuentros.

Víctor

Víctor te has adelantado tanto… Yo todavía tengo muchas preguntas de ponerte. Me dejas sin respuestas. ¿Dónde las voy a encontrar? Un día nos vamos a encontrar de nuevo, pero aquel día yo ya no tendré preguntas porque estaré delante de la más grande Respuesta. Mientas tanto descansa, haz lo que te costaba tanto, estate quieto en paz, sin ninguna prisa, preocupación, ni horario. Encuéntrate con los nuestros que han partido ya a aquel lado de la vida. Ustedes ahí son uno. Demasiado pronto se van, ni uno puede llorar lo suficiente. Gracias por ayudarme cuando más lo necesitaba. Sé que soy uno de tantos. Aquí en Pedrezuela has dejado muchas huellas. Muchos lloran tu muerte. Contigo planeaba a preparar los 20 años de la presencia espiritana en la parroquia. Tú ibas ser el invitado de honor. Lo serás, pero tu presencia será diferente. Ahora queda un suspiro, una oración. ¡Hasta luego amigo hermano! 

Descanse en Paz.

La conexión

Un día como este es bueno revisar un poco nuestra conexión, nuestra pertenencia. Somos los seres que toda la vida necesitan alimentarse. Lo que pasa que no solo se trata de alimentos, sino de un combustible más complejo. Necesitamos alimentar el cuerpo y el espíritu en esta dualidad algo artificial, pues no se puede poner la línea divisoria entre el uno y el otro. Tenemos que pertenecer, permanecer, ser conectados a una realidad más grande que trasciende los límites de nuestro yo. Pronto descubrimos la necesidad de retroalimentación y un intercambio saludable que nos enriquece que nos expande. La falta de conexión provoca el agotamiento. Ese a su vez nos induce a la pasividad. Conéctate a lo que de alimenta y da la vida.

 

Feliz domingo de conexión.