Levantaba los ojos mirando el cielo. No por soberbio, ni por inseguridad, sino por sentir que la respuesta a sus dudas, la solución de sus problemas está más arriba. Cuando uno puede tomar otra perspectiva, mirar desde más arriba, lo que nos ha crecido y parecía tan grande tapándonos toda la visión. Si miramos más arriba vemos que el mundo es más grande que nuestro problema. Si lo miramos desde arriba vemos que su tamaño es relativo. Confiamos en el poder escondido que nos puede ayudar a salir del hoyo en el que nos metimos. Así que parece cierto que la fuerza nos viene desde arriba, aunque Él que es la fuerza esté en todas partes.
Feliz martes de mirar arriba.

No hay comentarios:
Publicar un comentario