Cerrar círculos

En estas vacaciones mi Papá me ha regalado incontables historias. Había preguntas, comentarios y la preocupación por otros. Sin Mamá presente físicamente, la tuvimos en los cafés y en las conversaciones. Todo cerraba un círculo. Hace poco, resultaba imposible imaginar la casa sin ellos y ahora duele el silencio. Tuve que sentir su ausencia y despedirme de los dos y llevarlos conmigo. Nunca pensé que de estas vacaciones voy a llevar tanto. Algo que me acompañará el resto de la vida. Nos unimos inseparablemente, después de mis 29 años fuera de Polonia y después de 35 años fuera de la casa. Ahora quedan dichos, comentarios, aquellas bromas y aquellos enfados. Han trabajado duro, para dar algo a sus descendientes, para que estos puedan estudiar y conozcan una vida sin hambre y sin guerra. Lo han logrado, y si algo nos faltaba, es porque no supimos aprovechar lo que nos han dado. Quiero cerrar este círculo de tres textos sentidos y vividos. Habrá muchos recuerdos, una celebración en Pedrezuela. Poder compartir me da paz y seguridad de que “el café” con ellos tendrá muchos invitados, y Ustedes tomándolo podrán recordar a sus seres queridos, porque por aquel lado de la vida, en donde están ellos, todos son una sola familia en el amor. Desaparecerán las diferencia, los idiomas, solo habrá alegría y fiesta del encuentro. Todos se conocerán y unirán para siempre.

Feliz jueves de cerrar círculos.

Gratitud por ellos

Curiosamente he tenido tiempo de hablar con mi Papá sobre tantas cosas que hace tiempo que no hablamos. Él siempre preocupado por todos. Sabiendo que con Mamá han entregado todo lo que han tenido, sobre todo su trabajo y su cansancio a toda la familia. No los puedo mirar ni como santos, ni como intachables, ni perfectos, sino como profundamente humanos. Con su carácter, sus debilidades, su terquedad, sus orgullos. Siempre unidos, en la salud y en la enfermedad. Capaces de seguir tomando café en silencio, peleados, pero siempre unidos. Tenían sus bromas, sus risas. Diferentes caracteres, pero un amor y una familia. Han sembrado sabiamente y con mucho cuidado y discreción. Hasta ahora uno descubre su toque personal en muchas cosas. Sus dichos y comentarios, historias y aventuras. La vida no les ha privado de nada, de mucho sufrimiento en la guerra de hambre y enfermedad hasta la felicidad de la paz y la dicha de la casa propia, del estómago lleno y los hijos en la escuela. Luego ver como las familias han crecido y se ha diversificado siempre cerca de ellos, menos uno, que anda por el mundo y escribe estas palabras, que a veces queman dentro y salen con lágrimas. Siento gratitud a Dios y a la Vida por tenerles tan cerca.

Feliz martes e gratitud.

Encuentro sin límites

Hoy es la Fiesta Patronal de Tanlajás, S.L.P. en México. La Fiesta de Santa Ana y San Joaquín. Abuelos padres esposos. Hoy se cumplen ocho años de este blog, de estar Buscando Armonía, acompañado por tantas personas, y precisamente hoy estoy intentando armar el rompecabezas de la vida. Justo ayer partió mi Padre Konrad (Conrado). Exactamente 6 meses y una semana después de mi Mamá, su querida Zofia (Sofía). Nadie se podía imaginar tan rápida y discreta partida. Se despidió de toda la familia, visitó a todos y me regalo maravillosos e inolvidables días de julio de este año. Me contaba las historias de su vida y hablaba mucho de sus sentimientos, cuanto la extrañaba a ella, que difícil se le hizo la vida en soledad, aunque estuvo rodeado por su familia, nadie la pudo sustituir a ella. No entiendo, como pudo hacer todo tan bien, con tanto amor y discreción. Después de la muerte de Mamá 18 de enero, prometió que me va a esperar y lo hizo. El domingo 18 tomamos juntos nuestro café a las 10 no pensé que una semana después antes de las 10 estará con ella. Ahora los tendré cerca, siempre juntos, siempre conmigo. Me dieron tanto amor, que no lo puedo expresar en palabras. Lo tengo que vivir. Si me peritan les quiero invitar a nuestro café a las 10. Ya saben que lo de café y lo de las 10 es un decir, pero no lo de amar sin medida como solo saben amar los padres a los hijos. Tomemos café con nuestros seres queridos así como me han enseñado en la huasteca. Gracias por la vida y el camino que ya recorrimos. Les amo Mamá y Papá. Nos vemos por el otro lado de la vida.

Feliz lunes de encuentro sin límites.

Cambios y transformaciones

Todo alrededor crece cambia se transforma. Tantas cosas para el bien algunas para el mal. Sabiendo esto podemos mirar nuestra realidad y darnos un tiempo para el discernimiento, pues podemos ser víctimas de nuestra percepción de un instante generalizando como si fuera una realidad total, inamovible e inmutable. Mirando viendo todos los ángulos de una realidad, descubrimos las soluciones que crecen al lado de los problemas. Posibilidades que aparecen entre las dificultades. Encuentros en donde parecíamos condenados a la soledad. Comprensión entre la gente a la que nadie comprende. El secreto está en el tiempo, en la atención y en la quietud. Cuando el lugar de la queja está sustituido por la gratitud, ocurren los milagros.

Feliz jueves de cambios y transformaciones.

Buena y sana actitud

En mis paseos y encuentros descubro mucho sobre la actitud. Algo tan fundamental y básico en la vida de cada uno de nosotros. La actitud que a veces nos puede acercar a la solución de un problema o de unas personas, o alejarnos de todo y todos, formando barreras insuperables. La actitud se moldea, nos sirve de puente, nos amortigua golpes y caídas de la vida y nos da alas, cuando necesitamos superar un valle de problemas. A veces sirve de coraza para que no nos arañen ni pellizquen nuevos problemas. La contaminan y envenenan los que para cada solución tienen un problema, los que se bañan en la piscina de autocompasión, necesitando llamar la atención, no para encontrar soluciones, sino para perpetuar sus quejas, excusas y justificaciones. La actitud no es una pócima mágica, muchas veces no encuentra soluciones, pero siempre enseña caminos, enseña a caminar. Cuida tu actitud, no la envenenes con inyecciones de negatividad, desesperación y tristeza.

Feliz miércoles de buena y sana actitud.

Atravesar el camino

En mi salida con la bicicleta hay una parte de camino que me encanta. Cada vez que llego a ella la encuentro diferente. Siempre guarda escondido en sí algún misterio. Es como una gran alegoría de la vida. Parece que todo oscurece como cuando tenemos problemas y dificultades. Luego nos damos cuenta que oscurece porque encima tenemos el techo de los árboles y las plantas que nos cobija. Todo nos deja vislumbrar una luz al final de nuestro camino, que es la solución hacia la cual siempre caminamos. Hay que perseverar, ningún mal momento es tan largo que no lo podemos transitar. Solo hay que mirar y tratar de ver en los obstáculos las oportunidades y reconocer los verdaderos peligros y nuestros puntos de apoyo y referencia que en cada momento nos permiten ubicarnos y no tener impresión que andamos perdidos. Mira tus caminos y transita con confianza.

Feliz martes en el camino.

Atento equilibrio

Hace unos años ya había escrito sobre esta escultura. Hay que tener buena vista y mirar con atención para poder descubrirla en esta foto. Todo es cuestión de atención y equilibrio. Solo así se puede mantener sin caer al agua. Nosotros en nuestra vida tenemos muchos momentos en los que deberíamos poner mucha atención para equilibrar las fuerzas que quieren manejar nuestras vidas. Ahí tienen que aclararse las prioridades del momento para poder cruzar a la otra orilla de un proceso que estamos viviendo, siempre uno a la vez, nunca intentando mezclar las cosas. Aunque la vida no es ni tan simple, ni tan sencilla, no podemos abarcar a todo, durante largo tiempo. La sabiduría dice, que “el que mucho abarca poco aprieta”, abraca una cosa, luego otra y así consecutivamente. Eso te permitirá mantener cierto control y ubicarte en la línea de tu proceso.

Feliz lunes de atento equilibrio.

La mejor hora de "café"

Se cumple medio año de tú partida Mamá. Estoy en tu casa me siento en tu silla y miro por tu ventana. Todo lleno de tus huellas recuerdos, palabras y de tu luz. Voy a tener en mis manos tu cuaderno de las recetas. Así podré endulzar la vida y recuperar los sabores de mi infancia. Algo que tantas veces hicimos juntos. Sigue vigente más que nunca nuestro encuentro a las “diez” a la hora del café. A todos mis amigos y amigas que leen mis palabras les invito que durante su día tengan su “diez de la mañana” para tomar el café o lo que sea con nosotros. Así nos convertimos en una familia, en la que no hay distancias para el cariño, ni para el espíritu, solo hay para los cuerpos. Tengo la dicha de estar con mi Papá y mi Familia, son días de llenar los ojos y el corazón para el camino que tengo por delante. Habrá muchos ecos de lo vivido en las páginas del blog.

Feliz domingo de tomar un café.

La percepción

Parece un día más, así lo miro desde lejos. No tiene nada de especial fuera de un pequeño detalle. Este día es irrepetible lo que le da la calidad de único. Esta calidad provoca que caminando por los lugares conocidos encuentro en ellos cosas nuevas. Las huellas, que dejó el tiempo y los cambios que soñaron los que quieren ver este mundo cada vez mejor. Cambia el mundo que nos rodea cambiamos nosotros con el paso del tiempo y las experiencias que atraviesan nuestro cuerpo. Sorprende todo visto desde los diferentes puntos. En un mismo lugar estuve como estudiante, habitante, amigo, paciente y visitante. Cada una de las realidades condiciona la forma de percibir tiempos y lugares. Piensa en que momento te encuentras.

Feliz miércoles de percepción.

Palabras que rebotan

Las palabras que decimos tantas veces parece que caen en el vacío. Se quedan flotando en el espacio que nos separa de las personas. Hay palabras certeras como dardos, que dan en el punto exacto provocando reacciones. Unas esperadas, otras totalmente sorpresivas imprevisibles. Existen también las palabras que rebotan, nos tocan de cerca sus efectos y sus ondas expansivas. Las que rebotan lo hacen proporcionalmente a la fuerza con la que las tiramos. A mayor fuerza mayor rebote. Lo que casi siempre en estos casos significa mayor daño. Ten cuidado con palabras que usas que no lastimen a otros y no terminen lastimándote a ti.

Feliz martes sin palabras que lastiman.

A la mano

Lo nuevo no en espacios, sino en el tiempo, envuelve cada uno de nuestros pasos, de nuestros días. No siempre lo sentimos, lo vemos, concentrados en ver las imperfecciones, las faltas y no viendo la novedad y las posibilidades de ser feliz. Nos hundimos en las comparaciones con lo que fue y no es. Dicen, que si no consigues a ser feliz con lo que tienes, jamás a llegarás a serlo que con lo que te falte. Hay que cocinar la felicidad con los ingredientes de la casa y no con los que solo están en las tiendas, a mucha distancia de nosotros, que aunque son posibles de obtener, en este momento preciso son inalcanzables. Al inicio de este día mira lo que tienes y disfrútalo plenamente.

Feliz lunes de apreciar lo que tenemos a la mano.

Nuestras raíces

Paseando en la bicicleta encontré, al lado de un camino, “una montaña” de raíces de árboles, que han caído durante la tormenta. Me paré y con respeto empecé a observarlos, pensando en sus historias. Los árboles que han cargado, soportado encima que han alimentado durante años, posibilitando su crecimiento. Cuantas tormentas han soportado, de cuantas cosas fueron testigos a lo largo de los años. Las raíces de estos árboles son como nuestros padres. Ellos nos enraízan en un lugar, nos vinculan con un espacio concreto, nos cargan y alimentan. Aseguran nuestro crecimiento. Son testigos del desarrollo y también de las grandes caídas a causa de las tormentas de la vida. Es bueno pensar en ellos y rendirles tributo por todo lo que han hecho. Se merecen mucho, empecemos por el respeto.

Feliz jueves de admiración de nuestras raíces.

Estar juntos y volar

Estar juntos, simplemente juntos. Hablar sin parar y quedarse en silencio. Mirando, escuchando y sintiendo. Después de tanto tiempo, el estar tiene un valor incalculable, cuando sentimos que la vida nos ha cortado un ala, nos abrazamos a otros para poder volar. No es fácil levantar el vuelo pero es posible. Se necesita la sincronización y la confianza. No es asunto de uno solo, sino de los dos, que se vuelven uno. Aunque escasea la confianza, es bueno practicarla con sumo cuidado, porque si no, nos condenamos a no levantarnos del nivel más bajo en donde siempre va a existir el fango. Levanta la cabeza y mira el cielo que te pertenece, en él hay lugar para todos los sueños y todos los encuentros.

Feliz miércoles de volar.

La novedad de lo conocido

En las vacaciones uno tiene la sensación que regresa a lugares conocidos y transita los caminos de siempre que llevan a estos lugares. Todo solo es una impresión. Todo está cambiando, y nosotros con este “todo”. No solo cambian los lugares, cambian también los caminos que llevan a ellos y cambia también nuestro equipaje. Siempre cargamos a todas partes lo que hemos vivido, lo que ha pasado en nuestras vidas desde la última vez que caminamos. Me toca descubrir de nuevo los caminos, los lugares y el equipaje. Todo se conecta, todo se entrelaza y todo se complementa. Como las pinturas en la paleta del pintor al mezclarse crean nuevos colores con diferentes intensidades, así los sentimientos que quedan después de lo vivido influyen en nuestro percibir la realidad y los paisajes que observamos. Estos días cada día me invade la novedad de lo conocido.

Feliz martes de la novedad.

Haciendo cuentas

Tal vez un lunes no es un buen día para hacer cuentas, pero cuando uno se para un rato, puede mirar atrás. Añadido el ambiente de vacaciones con todas las novedades habidas y por haber, uno piensa en todo lo que ha pasado y como ha pasado y de qué manera está moldeando mi realidad hoy. Tantas cosas, uno pensaba, suponía, imaginaba, y no eran así como lo hemos dibujado en nuestra imaginación. Hoy he tenido la sesión de hemodiálisis número 200, y aunque fue un poco accidentada por los calambres que me dieron, nada tiene que ver con lo que me imaginaba cuando en 2001 me hablaban de este “peligro” por el natural desarrollo de mi problema renal. Las cuentas dicen que 200 sesiones son 400 agujas, con un promedio de más de 4 horas cada sesión, son 800 horas conectado. Eso es la cruda estadística de cifras, pero son muchos encuentros bromas, alegrías y tristezas con mis compañeros, muchas horas de lectura de las novelas maravillosas, libros interesantes, conversaciones y pensamientos. Ver que se puede cuando parecía que no se va a poder. Ser agradecido con Dios y con las personas que me acompañan, por los que me leen y se preocupan por mí. No es una parada, ni un impedimento, es un cambio de rutina y una posibilidad de apreciar lo que antes ni se tomaba en cuenta. Una parte de camino en la que hay que andar despierto. Que siempre nos sigamos encontrando y si alguien falte, que sea solamente porque está mejor.

Feliz lunes de hacer cuentas.

El agua y el tiempo

En el patio de la casa hay una pequeña cascada artificial. El agua corre, así como corre el tiempo. Uno tiene la sensación que todo se repite y nada se repite. Nada es lo mismo aunque todo se compone de las pequeñas gotas del tiempo. A veces nos mojan, otras nos sumergimos en él o incluso nos dejamos a llevar flotando. Nos sentamos en la mesa los mismos sintiendo las ausencias, descubriendo las presencias. Me cuesta entrar sin mirar a los lados de este tiempo, que son los mismos que los lados de mi vida, de mi propia historia, que no son más que el tiempo solidificado en hechos y efímero de los recuerdos. En estas vacaciones habrá muchos descubrimientos sobre el tiempo. Que fluya a través de mí y que me lleve a los encuentros. No olviden el café a las 10.

Feliz domingo del tiempo.

Regresos

Los regresos siempre están llenos de sorpresas. Sentimientos a flor de piel. Esta mirada con los ojos sudorosos, que hace que todo lo que vemos tiembla, así como las lágrimas de emoción, que aparecen en nuestros ojos. Hay encuentros que tocan el corazón y hay ausencias que lo desgarran. Lo que más toca es la ausencia – presencia de Mamá. Aunque no está físicamente la siento en cada momento. Vuelvo a los lugares, a las conversaciones no terminadas, repitiendo nuestras costumbres estelares como el tomar café a las 10. Recordar aquellas cosas que vivimos sentimos que se nos quedaron grabadas en el corazón. Aquí se cierra este círculo interrumpido con su partida y empieza el nuevo con su otra presencia. Quiero aprender saborear todo plenamente. No detenerme en la ausencia, quiero ir descubriendo nueva presencia.

Feliz sábado de nueva presencia.