Liliana tenía sus manos siempre tan ocupadas no podían con más cosas. Si pudiera tener más manos haría más cosas. Lo que pasa que la capacidad de hacer más cosas no depende de tener más manos. Todos los humanos solemos tener dos. Esta capacidad más bien depende del talante de priorizar y soltar unas cosas para poder atender otras. Tenemos que saber lo que hay que hacer y cuándo para responder a las necesidades urgente las nuestras y las de los que nos rodean y dependen de nosotros. Trata de darte un tiempo para mirar lo que ocupa ahora tus manos, por qué te sientes tan cansada/o tan presionada/o.
Feliz sábado de liberar las manos.

No hay comentarios:
Publicar un comentario