Luis
se quejaba de la mala calidad de señal de Internet. Los mensajes que
enviaba, no siempre llegaban a tiempo. Se sentía incomunicado, como
si alguien le hubiera quitado la voz. Era
su percepción, pero no era su realidad. Tal vez, por problemas con
Internet no podía comunicarse con los que estaban muy lejos de él,
pero muy cerca tenía los que necesitaban de verdad una comunicación,
viva y directa. Para poder comunicarse con ellos, tenía que salir de
la red, separar sus ojos de la pantalla y comunicarles su cariño en
palabras y silencios, gestos y miradas. Una comunicación con una
increíble
cobertura, calidad,
velocidad
y asegurada eficacia. Comunicate directamente con las personas que
amas. Ningún abrazo o beso virtual puede llenar el vacío, la
ausencia y transmitir el calor del cariño en la familia.
Feliz
jueves de mundo real.

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