La música nos acompaña, con ella
vienen los sentimientos, los recuerdos. Supongo, que todos tenemos
algo, que solemos llamar “mi música”, algo que nos identifica,
es representativo para nuestro origen, nuestros gustos, nuestra
personalidad. Los que vivimos lejos de nuestra patria, muchas veces
experimentamos, cómo la misma música suena diferente, conforme a la
distancia, que nos separa de la casa, la familia, de los seres
queridos, del país. Para mí, así es la música de Frédéric
Chopin. Sus notas, sus ritmos, sonidos, siempre me transportan a
Polonia. Mientras más lejos estoy de ella, más fuerte suenan y más
hondo llegan al corazón. Busca lo que te suena en tu corazón...
Feliz Martes de sonidos.
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