Parece
que siempre estamos balanceando sobre la cuerda floja de los
sentimientos buscando un equilibrio que nos ayude a no caer. El
equilibrio nos ayuda a hallar el encuentro de los opuestos. La
tristeza busca a su alegría, la enfermedad busca a su salud, la
soledad a su compañía. Siempre falta de algo le recuerda la
necesidad de algo. Ese algo que se puede perder si no se cuida, si
uno vive sin atención, si no se fija en los detalles. Un balance que
perdido es difícil de recuperar, lo que no quiere decir imposible.
Un equilibrio que no significa una aburrida constancia de sinsabores
sin la excitación que provoca el desafío la aventura, que se vuelve
como base para todo lo demás.
Feliz
miércoles de equilibrio.

No hay comentarios:
Publicar un comentario