No quería que la clasifiquen y
encierren en unas categorías rígidas. Siempre ha defendido su
libertad e intimidad. Decía que la gente saca conclusiones
conociendo solo lo exterior olvidando la esencia. Enseñando las
plantas decía que mucha gente se queda mirando flores, si estas no
existen, no se fijan en las hojas ni los tallos muchísimo menos en
las raíces. Incluso admirando flores olvidan las semillas y los
frutos. Así es con las personas. La cultura, la moda quiere que nos
parezcamos a flores y la belleza es buena aunque puede ser muy
relativa. Sabemos que a parte de las flores naturales existen las
artificiales de plástico que no son más que la imitación y no
tienen ninguna esencia ni fruto ni semilla. Date tiempo para
conocerte más, busca tu esencia tus frutos a pesar de que te pongan
etiquetas o te clasifiquen luego trata de conocer mejor a los que te
rodean.
Feliz sábado de la esencia.

No hay comentarios:
Publicar un comentario