Algo no le dejaba en paz. No sabía
definir que era ese algo, pero si sabía que lo tiene toda la gente.
Ese algo que a veces tiene el sabor de algún asunto pendiente, una
conversación no hecha, mensaje no enviado, una discusión
repentinamente interrumpida. La lista podría ser interminable. Hay
que tener mucho cuidado para que nuestra vida no se llene de “algos”
porque nos pueden bloquear completamente, quitándonos la paz, la
tranquilidad, buen sueño y apetito. Cuando hay demasiadas cosas en
la espera, ya perdemos la noción de lo que es realmente importante.
Muchas cosas que nos llenaban de alegría y daban sentido a nuestra
vida se vuelven como pesadas obligaciones llenas de monotonía y
sinsabores. Tal vez es imposible no tener algo pendiente, pero trata
de atender lo que está a tu alcance y tu paz irá en aumento.
Feliz martes de atender mi “algo”

No hay comentarios:
Publicar un comentario