Cuando viajaba, siempre buscaba, las mejores conexiones entre los
lugares, los caminos más cortos y las esperas menos pesadas. De esta
manera, con el menor
desgaste de energía, llegaba lejos. Y en cada camino, por muy corto
o largo que sea, encontraba personas, que como señales de tráfico,
mostraban sus corazones. Algunos llenos de avisos y advertencias,
otros llenos de prohibiciones y limites. A veces muy poco legibles
ocultas bajo otros avisos. Todos con una información muy útil, para
que podamos circular con más fluidez, por nuestros caminos de la
vida. Es bueno leer estas informaciones y también buscar los
caminos más cortos de corazón a corazón, sin tantas esperas ni
desvíos.
Feliz
Martes de caminos y corazones
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