domingo, 22 de noviembre de 2015

Sin ansiedad

Desde que era niña solía ser muy ansiosa. Siempre a la espera de algo. Esperaba que se termine eso o aquello. Mientras más crecía y más conciencia tenía, el final de más cosas esperaba. Así esperaba que; se terminen las clases, que se terminen las vacaciones, que se termine el trabajo, los estudios. A la primera vista no se ve nada malo en eso. Todos esperamos que terminen estas cosas. Su problema no era esperar que algo termine, su problema era no saber qué hacer consigo misma una vez terminado lo que tanto esperaba. Eso no hacía otra cosa que aumentar su ansiedad. Muchas veces uno se olvida, que al terminar una cosa empezamos otra o más bien otras. No vivimos para terminar nada, vivimos para sentir, amar, participar en los procesos, saborear las diferentes etapas de la vida. Cada etapa que terminamos no tiene un punto final, sino una puerta o ventana que nos abre a un nuevo sinfín de posibilidades. No te pongas ansiosa para salir, disfruta estando dentro, porque no vas a poder vivir dos veces la misma situación, la misma vida.

Feliz domingo sin ansiedades.

No hay comentarios:

Publicar un comentario