Raymundo tan seguro en su trabajo, entregado siempre
a lo que hacía, un hombre do confianza de su jefe, un poco rudo y de
pocas palabras, se sentía totalmente desplazado, fuera de lugar, en
su propia casa. Tenía pavor a los fines de semana. Estos lo
obligaban a estar con sus hijos, sin poder huir a los trabajos en el
patio o en la cochera, pues sus hijos como sombra lo seguían. Él
los quería mucho y se sentía orgulloso de ellos, aunque si bien
recuerda, nunca les dijo eso. Tenía la sensación, que el papel de
papá le supera, que de esas cosas no sabe nada. Hasta que escucho a
sus hijos diciendo a sus amigos, que lo más lindo de fin de semana
es que Papá está con nosotros. Eso fue todo el secreto de ser buen
Padre. Estar con los hijos, sin grandes discursos ni promesas.
Raymundo se sintió aliviado, ya nunca más los fines de semana le
daban miedo.
Feliz Domingo de Estar con Familia.
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