domingo, 27 de abril de 2014

Sellando con sonrisa

Marlene tenía suficientes motivos para poner una cara de circunstancia, pero siempre sus problemas, sellaba con una sonrisa. Su sonrisa era muy luminosa, así que le permitía ver la felicidad, que estaba escondida, detrás del túnel de la tristeza. Sus alegrías, a veces se parecían más, a lenguas de fuego de una lámpara de aceite, que a la luz de un faro potente. Marlene no se quejaba por eso. Su alegría, su felicidad para ser completa, no tenía que ser enceguecedora, era suficiente que le ilumine el camino de su vida. Colecciona sonrisas, sella con ellas los escapes, las fugas de tristeza y tu vida será más luminosa.



Feliz Domingo de sellar con sonrisas.




No hay comentarios:

Publicar un comentario