Esta mañana en la radio
en San Vicente, por la puerta abierta, entraron unos recuerdos.
Entraron como niños, que
entran corriendo en un lugar y se callan sorprendidos por lo que
encuentran. Primero corre su cuerpo luego sus palabras, primero sus
risas y abrazos luego sus sentimientos y explicaciones.
No fue mi primer encuentro
con ellos. Hablando, nos dimos cuenta, que el “antes” hace cosas
malas más pequeñas y las buenas más grandes. Nos quita los años,
nos devuelve los amores y las perdidas. Permite los regresos, quita
las enfermedades y regresa aquí a los que ya se
fueron. Así que hoy jugué con el “antes” y mucha gente encontré
y a muchos lugares me fui.
Les invito a un viaje con
el “antes”. Buen Viaje
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