jueves, 9 de junio de 2016

Las Reconciliaciones de Mar

Mar para ser feliz tuvo que aprender a reconciliar muchas cosas en su vida. Una de las primeras reconciliaciones era la de su trabajo y su vida privada. A cada uno le daba su tiempo y su sitio, sin mezclar uno con el otro y sin permitir que el uno invada el espacio del otro. Tarea complicada pero posible. Al hacerlo pudo notar que disfrutaba más de las dos. Otra reconciliación llegó a tocar su pasado y sus errores desaciertos y meteduras de pata, que como una sombra la perseguían. Fue ella que tuvo que entender que ya no importa, que está hecho, que se queda en el pasado y en su memoria. Al reconciliarse con eso su memoria dejo de doler se convirtió en aprendizaje, en advertencia y una anécdota del pasado superado y vencido. La reconciliación con algunos familiares y amigos llevaba más tiempo, se necesitaba bajar el nivel de orgullo y subir el de sinceridad y honestidad. Aclarar las posiciones y mutuas expectativas. Quedando con lo más importante, lo esencial, lo vivido y compartido. La última de la serie de las reconciliaciones, la más difícil la más importante y fundamental fue la con ella misma. No podía mentirse, ni engañarse, tenía que presentarse delante de ella misma así como es y no como dicen que es. Eso no era tarea fácil. No se admitían medias verdades, ni soluciones a medias. Solo la verdad y desde la verdad camino hacia la felicidad. No importa cuántas reconciliaciones te esperan son necesarias. Gasta tu energía en ellas y no en los enojos rencores y reproches.
Feliz jueves de reconciliaciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario